MAR DE LA GALILEA, RENOVANDO EL LLAMADO



El Mar de Tiberias, llamado así en honor al emperador romano Tiberio, es conocido también como el Mar de Galilea o Lago de Genezareth. Este lugar es importante para el cristianismo porque Jesús caminó sobre sus aguas, allí se realizó la pesca milagrosa, y en sus alrededores predicó a multitudes y produjo el milagro de la multiplicación de los panes y los peces.

No sabemos cuánto tiempo ha pasado después de la primera aparición de Jesús, ni el tiempo en que los discípulos han permanecido en Galilea. Lo que sí sabemos es que estos pescadores, al estar frente al lago, reviven viejos recuerdos y deciden ir de pesca. Pedro toma la iniciativa y el resto lo acompaña. Las esperanzas de obtener una buena pesca se convierten en derrota cuando al amanecer aún no han obtenido nada. Mientras ellos intentan pescar, Jesús llega a la orilla y los saluda. Ellos no lo reconocen, pero cuando él les indica el lugar exacto donde tirar la red, Juan reconoce al Maestro, pero es el impulsivo Pedro quien se lanza al mar para llegar antes que los demás a la playa. Jesús ha preparado el desayuno e invita a sus discípulos a comer. Ellos lo han reconocido pero no se atreven a preguntarle: “¿Tú, quién eres?”

Jesús comparte con ellos el pan y el pescado, y después de haber comido se dirige a Pedro para comisionarle la labor de pastorear y cuidar el rebaño del Señor. En una experiencia similar con el maestro, éste les había prometido a Pedro y a su hermano Andrés hacerlos pescadores de hombres (Mateo 4:19 y Marcos 1:17). Ahora se dirige exclusivamente a Pedro y lo comisiona para ser pastor de ovejas. La idea que el escritor del Evangelio mantiene sobre el tema del Buen Pastor se deja ver en este relato. Pedro debe convertirse en ese pastor idóneo, dispuesto a amar (ágape) de tal modo que éste dispuesto a ofrecer su propia vida a causa de sus ovejas


LA RESTAURACIÓN PARA EL LLAMADO

JUAN 21:15-17

INTRODUCCIÓN: 

Los discípulos de Jesús se habían olvidado de su llamado y habían vuelto atrás, a sus labores de su pasado, habían olvidado su comunión con Dios.

Una vez que el Señor se había manifestado a sus discípulos en esta tercera ocasión mostrándoles que El seguía junto a ellos para guiarlos y proveerles de alimento y comunión, se dirige ahora a Pedro para poner al descubierto su corazón y restaurarlo, de manera que pueda cumplir con la misión apostólica y pastoral para la cual había sido escogido.

LA RESTAURACIÓN DE PEDRO

Pedro había negado 3 veces al Señor, sin contar las veces que había contradicho Su Palabra. Mateo 16:21-22, 26:33-35; Lucas. 22:33; Juan. 13:37. Por tanto en estos momentos estaba desconcertado de cuál sería su futuro. 

Jesús examina el amor de Pedro. Después de las 3 negaciones de Pedro a su maestro, Jesús quería que hiciera 3 afirmaciones de Su amor. - 3 veces le hace la pregunta. Me amas?, aunque con diferente énfasis; dirigiéndose a Pedro por su nombre original; Simón hijo de Jonás. - 3 veces Pedro le responde, manifestándose con sinceridad sus sentimientos. - 3 veces lo encomienda al servicio de su rebaño. Expresándole su perdón y haciendo enfática su restauración.

1ª pregunta. ¿Me amas más que a estos? 3 posibles interpretaciones, más que a los otros, más que los otros y más que su vida como pescador. Amas (Agapao= amor profundo, amor incondicional que incluye la mente y la voluntad) 1 Corintios 13:4-8a. ¿Tienes hacia mí, ese amor profundo por encima de todo? Respuesta. Sí, Señor. Tú sabes que solo te tengo afecto. (phileo= afecto emocional). Pedro reconoce a Jesús como su Señor y quien conoce perfectamente su imposibilidad de profesarle un amor profundo semejante al de Él. Conocía perfectamente el corazón de Pedro. 2:25. Encomienda. Apacienta mis corderos. Apacentar (bosko= llevar a los pastos para alimentarlos) y Corderos (Arnion = Diminutivo de Aren; cordero; corderitos). Jesús estaba restaurando a Pedro para el oficio de llevar el alimento a la grey del Señor, llevar Su Palabra a los perdidos y alimentando a aquellos pequeños creyentes que apenas empiezan su camino en el Evangelio, que son débiles e inmaduros. 

2ª Pregunta. Jesús le repite la pregunta pero esta vez sin hacer la comparación de la primera. (Verbo: Agapao) Me tienes un amor profundo? Respuesta. Pedro repite su sumisión al Señorío y omnisciencia de Jesús mostrándose nuevamente que lo que siente por él es un afecto sincero, pero egoísta. Amar y querer no es igual. Encomienda. Pastorea mis ovejas. Pastorea (poimaino= supervisar, cuidar el ganado) Ovejas (probaton= cuadrúpedo que camina hacia adelante. Que sigue al pastor). Jesús estaba restaurando a Pedro para el oficio también de pastorear, o sea cuidar y defender a quienes ya están dentro del rebaño y son obedientes a la voz del pastor y le siguen, pero que son propensas a desviarse y que son dependientes en todo a su pastor.

3ª Pregunta. Jesús ahora baja al nivel de afecto de Pedro y pone en duda incluso este sentimiento. De verdad me tienes afecto? 3ª Respuesta. Pedro se entristece ante la duda del Señor incluso acerca de su afecto, pero reconoce sin temor a equivocarse que su afecto por Jesús es sincero. 3ª Encomienda. Apacienta mis ovejas. Alimenta a quienes pertenecen al rebaño. La función a la que Jesús encomendaba a Pedro entonces era la de pastor y maestro. Efesios. 4:11, un ministerio que va de la mano, un pastor debe ensenar la Palabra y un maestro debe cuidar del rebaño. 


APLICACIÓN TEOTERAPICA

Qué tienes que hacer para que tu amor por Jesús sea la prioridad máxima en tu vida?Primero, tienes que ser absolutamente sincero, contigo mismo, acerca de la profundidad de tu amor por el. y segundo, necesitas pasar tiempo con Jesús, porque cuanto más tiempo estés con el, más lo amarás.

Lee su palabra, ora, medita en ella, busca su presencia. Tu llamado es lo primero, permite que el Espíritu Santo mantenga vivo la llama de amor y servicio hacia aquel que te comisiono para grande y valiente obra.










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