“OCHO MANERAS DE MALGASTAR EL TIEMPO”






INTRODUCCIÓN

Hay quienes expresan: Yo soy libre de hacer lo que quiera, y claro tienen razón, pero no todo lo que uno quiere conviene; es así como escrito esta: “Todo me es licito, pero no todo conviene; todo me es licito, pero no todo edifica” (1 Corintios 10:23). Hoy como nunca el mundo y la tecnología ofrecen una amplia gama de alternativas para ocupar nuestro tiempo, en contraste nuestro creador nos exhorta a emplear bien el tiempo pues nos ha entregado una misión muy clara y es Glorificarle y ganar el mundo para Cristo.

ASPECTOS QUE NOS HACEN PERDER EL TIEMPO:

1. La preocupación

La preocupación nos mantiene ocupados, pero no nos lleva a ninguna parte. Jesús dijo en Mateo 6:34 que no nos preocupáramos porque eso no causa ningún bien, y si puede hacernos desgraciados a nosotros mismos; o por el contrario puedes decidir cambiar la preocupación por confianza en Dios.

2. La culpabilidad

Hay quienes malgastan cada día de su vida sintiéndose culpables por el ayer, ignorando que Jesús llevó nuestros pecados en la cruz.
No puedes hacer nada en cuanto a tu pasado, pero puedes hacer mucho en cuanto a tu futuro, y eres tu quien decide obedecer a Dios dejando atrás el pasado y así abrazar una nueva oportunidad (Isaías 43: 18-19).

3. Tratar de cambiar lo que sólo Dios puede cambiar

Una gran pérdida de tiempo se produce cuando intentamos cambiar a otras personas; si no tienen interés de cambiar, todo esfuerzo será inútil. Debemos emplear nuestra energía en orar dando lugar a el único que puede alcanzar el interior de una persona para sanar y cambiar lo que necesita un cambio. (1 Corintios 3:6).

4. La queja

Los seres humanos somos quejosos por naturaleza, por eso es que cada vez que algo nos desagrada o nos molesta nos quejamos. De la queja nunca sale nada positivo, por el contrario, la queja, la crítica y la murmuración abren una puerta para que el enemigo traiga destrucción a nuestras vidas. (Números 12:8-10).

Toda queja se origina en un pensamiento y Dios nos pide pensar en lo bueno, lo amable, lo digno, lo que tenga virtud alguna; de modo que si no puedes cambiar algo, entonces cambia la manera en que piensas de ello, pero no te quejes. Cambia las quejas por oraciones.

5. El enojo

Los estudios de salud afirman que aferrarse al enojo, el resentimiento y el dolor sólo causa músculos tensos, dolor de cabeza, mandíbula dolorida y otra serie de trastornos físicos y del alma.
Jesús nos dio la solución perfecta para la ofensa, él dijo que perdonemos a quienes nos hieren, abusan de nosotros o nos tratan mal (Romanos 12:21).

6. El temor

El temor obstaculiza el progreso y no permite el cumplimiento del plan de Dios en nuestras vidas. El temor es arma usada por el enemigo para que no cumplamos el plan de Dios, por esto debemos recordar los que dice 2 Timoteo 1:7.

El temor es esperar que algo malo suceda, pero Dios quiere que creas que él es más grande que cualquier problema que tengas que enfrentar. Ante los problemas trae a memoria las promesas de tu Dios y abrázalas. (Isaías 41: 10-13)

7. Culpar a otros

Si llegas tarde al trabajo, si no administras bien tu dinero, si tu vida es confusa y no está en orden, siempre encontrarás un responsable. (Génesis 3: 12-13).

El primer paso hacia el cambio es tomar la firme decisión de hacer lo necesario por tu bienestar, asumir la responsabilidad de tu vida y dejar de buscar culpables.

8. Las comparaciones

Desde temprana edad tenemos la tendencia de comparar lo que tenemos con lo que otras personas tienen, la forma como actuamos con la forma cómo actúan otros, nuestras capacidades con las capacidades de otros, nuestro hijo mayor con el menor, compararnos con otras personas que parecen tener una vida más agradable y prospera que la nuestra, y así sucesivamente.

La recomendación es que dejemos de mirar al lado, ¡Dios tiene un maravilloso plan individual para cada uno de nosotros!

Puede que Dios te lleve por una ruta que tu no escogerías, pero él tiene una razón para eso (Isaías 55:8-9). No malgastes tu tiempo comparando, porque dejarás de disfrutar lo que tienes, quien eres y solamente te conducirá a la envidia, el resentimiento y la frustración. Las comparaciones son usadas por el enemigo para desviarte del camino y de los pensamientos de Dios para tu vida. Jeremías 29:11.

APLICACIÓN TEOTERÁPICA

Dios nos ha regalado una preciosa vida que debemos invertir en amar y no dejar que el corazón se vaya llenando de cargas y dolores acumulados por las situaciones de la vida. Debemos comprender las palabras de nuestro padre en la fe “Una sola vida tenemos y ésta, debemos invertirla no desperdiciarla” La clave para vivir un año de bendición y heredar las promesas de Dios sobre nuestra vida es invertir nuestra vida en lo eterno trayendo frutos extraordinarios que nos harán realizadas y felices



































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