CARÁCTER DE UN HUESPED DE DIOS


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SALMO 15

David le hace dos preguntas al Señor:

   1.    Jehová, ¿Quién habitará en tu tabernáculo? 
   2.    ¿Quién morará en tu monte santo?


¿Por qué David hace esas preguntas? Porque sabe que Dios es Santo, el Santo de los santos. Porque entendía su condición humana, sabía su fragilidad y debilidad; y cuando estaba delante de la presencia de Dios experimentaba temor y reverencia.

La respuesta de Dios:

Once características del hombre justo, quien es recto en obras, palabras, actitudes, relaciones personales y relaciones financieras. Estas cualidades no son propias del hombre, pero son impartidas por Dios.

(v. 2) “El que anda en integridad y hace justicia, Y habla verdad en su corazón”


  •    El que anda en integridad: Algo íntegro es algo que está completo, sin fisuras, algo bien terminado. Con respecto a nuestra fe, quiere decir aprobados, sanos en la doctrina (Tito 2:7; Proverbios 10:9; Salmo 84:11

  •   2. El que hace justicia:  Ser recto, fiel y honorable con todos los que trata. Solo alguien justo (exonerado de todos los cargos) puede aplicar la verdadera justicia. Justo es quien hace la voluntad de Dios.

  •   3 El que habla verdad en su corazón:  Es sincero, honesto. Aborrecedor de la mentira, no anda en engaños, no se engaña así mismo, tampoco a los demás.

(v. 3) “El que no calumnia con su lengua, Ni hace mal a su prójimo, Ni admite reproche alguno contra su vecino.”


  •   El que no calumnia con su lengua: significa: calumniador, falso acusador. Se usa como nombre, y se traduce «calumniadoras» en 1 Timoteo 3.11; 2 Timoteo 3.3; Tito 2.3. La referencia es a personas que tienen inclinación a encontrar defectos en el comportamiento y en las actitudes de otros, y a esparcir sus acusaciones y críticas en la iglesia.
          CENSURAR, DECIR (MAL), DIFAMAR, INJURIAR,
    MAL, ULTRAJAR, VITUPERAR. 


  • Ni hace mal a su prójimo: hay muchas maneras de hacer el mal, a veces nuestra indiferencia también hace mal a los que nos rodean. Se hace mal con nuestras actitudes o con los dichos de nuestra boca. La palabra de Dios dice que debemos hacer el bien (Proverbios 3:27; Isaías 1:17; Lucas 6:35)


  • Ni admite reproche alguno contra su vecino:  No solo perdemos comunión con Dios cuando hablamos de alguien, si no también cuando admitimos que nos hablen mal de nuestro prójimo. No debemos acusar a nadie que no esté presente para que se defienda.
(v.4) “Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado, Pero honra a los que temen a Jehová. El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia;”


  •   Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado: no se trata de odiar a los impíos, si no de alejarnos de todo acto de perversión, no tener comunión con el malo (Salmo 1)


  •   Pero honra a los que temen a Jehová: Dar lugar de honra a aquellos que caminan íntegramente en la fe.


  •    El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia: Es quien no compromete sus principios por las dádivas del mundo, mantiene su fe intacta a pesar de las circunstancias. Se mantiene firme en sus promesas.

(v. 5) “Quien su dinero no dio a usura, Ni contra el inocente admitió cohecho….


  •   Quien su dinero no dio a usura: No busca enriquecerse a causa del pobre.

  •   Ni contra el inocente admitió cohecho: Es decir no acepta soborno para perjudicar a alguien.

Su recompensa

v. 5 “…El que hace estas cosas, no resbalará jamás”