MONTE GILBOA

"Gilboa" viene de la palabra hebrea "burbujeante", debido a una fuente local abundante. 





¡ Saúl Desechado por Dios!


Saúl (hebreo ‘pedido’, a Dios.) 
Primer rey de Israel, hijo cfe Cis, de la tribu de Benjamín.

Introducción

Saul emprende un viaje buscando las asnas de su padre que se han escapado. Al final de este viaje le aguarda la corona de un reino. 

Toda la preocupación y el esfuerzo de Saúl iban encaminados a cumplir la tarea que su padre le había encomendado y encontrar las asnas perdidas. A punto de renunciar a su infructuosa misión (1 Samuel 9:5), su criado le sugiere que vayan a ver al profeta Samuel, en la esperanza de que éste les pueda dar alguna razón de los animales extraviados (1 Samuel 9:6). Ambos encuentran al profeta y éste les anuncia que las asnas han sido encontradas, y les invita a comer con él (1 Samuel 9:20). Los dos jóvenes duermen aquella noche en casa de Samuel, y a la mañana siguiente el profeta unge en secreto a Saúl por rey de Israel (1 Samuel 10:1). De esta manera, el hombre que iba buscando unas asnas perdidas acabó encontrando una corona.

1. principio de su reinado Saúl dio señales de estar revestido de una humildad y sabiduría

Así, por ejemplo:
a) Supo callarse para él lo que su curioso tío no debía saber todavía (1 Samuel 10:14-16).
b) Hizo oídos sordos a las declaraciones despreciativas que hicieron sobre su persona algunos perversos el día de su elección pública como rey de Israel (1 Samuel 10:27).
c) No se enorgulleció públicamente de su elección, sino que se escondió humildemente entre el bagaje porque se consideraba inadecuado (1 Samuel 10:22).
d) Se dispuso a ayudar inmediatamente a los amenazados habitantes de Jabes de Galaad (1 Samuel 11:1-9).
e) Manifestó en su resolución la firmeza y el valor de un verdadero rey capaz de mover al pueblo con autoridad cuando es necesario (1 Samuel 11:7).
f) Hizo gala de la magnanimidad de un corazón real grande y noble, perdonando a los que le habían menospreciado anteriormente (1 Samuel 11:12-13).

Todas estas acciones revelan el prometedor comienzo del reinado de Saúl, que había sido puesto por Dios para liberar a Israel de la opresión de sus enemigos.


Pero este buen comienzo se torció muy pronto, pues Saúl fue apartándose cada vez más del camino de la obediencia y de la fe en el Dios de Israel, y fue convirtiéndose lenta y progresivamente en un rey “como los de las demás naciones”.


Su gobierno autocrático entró en conflicto con la teocracia de Israel, y se hundió fatalmente, pues Israel no puede tener “un rey como las demás naciones”. El único que gobierna sobre Israel es Dios, y si alguien quiere gobernar con éxito sobre Israel habrá de observar en todo la ley y la palabra de su Dios.


2. ¿Por qué razones se produjo esto? 


Su impaciencia:  En su guerra contra los filisteos Saúl se vio en una situación muy delicada. Según 1 Samuel 13:5 los enemigos se habían congregado en gran multitud, Israel, en cambio, estaba acobardado. Samuel había prometido venir para ofrecer sacrificio a Dios que inclinase a favor de Israel el signo de la batalla. Saúl le había esperado durante siete días (1 Samuel 13:8). Los israelitas empezaban a desertar. Entonces Saúl creyó que no podía continuar esperando más y, contraviniendo la ley de Dios, ofreció él mismo el sacrificio.


Su incredulidad  Saúl describe la razón de su falta con sus propias palabras, al decir: “ Porque vi que el pueblo se me desertaba, y que tú no venías dentro del plazo señalado y que los filisteos estaban reunidos en Micmas, me dije: Ahora descenderán los filisteos contra mí a Gilgal ” (1 Samuel 13:11-12).


Saúl ponía sus ojos en las circunstancias en lugar de fijarlos en Dios. Su pensamiento era correcto desde un punto de vista humano, pero equivocado desde una perspectiva divina.


Su desobediencia  De la impaciencia y la incredulidad Saúl pasó a la desobediencia. Las palabras de Samuel habían sido:  “Espera siete días, hasta que yo venga a ti y te enseñe lo que has de hacer”  (1 Samuel 10:8). De manera que Saúl no tenía que hacer nada hasta que llegase Samuel. ¡El examen de Saúl consistía simplemente en no hacer nada! Si no hacía nada, sería rey. Dios conoce a los suyos. Y a cada uno lo prueba conforme a su necesidad.


Saúl no obedeció la clara orden.  “Ofreció el holocausto”  (1 Samuel 13:9). Y su desobediencia le costó su corona.


3. Triste final de un hombre que un día fue llamado por Dios, de un ungido del Señor, de un hombre a quien Dios había cambiado el corazón, pero que decidió caminar su propios caminos, seguir los deseos de su corazón.

Los filisteos combatieron contra Israel, y los hombres de Israel huyeron delante de los filisteos y cayeron muertos en el monte Gilboa.

Los filisteos persiguieron de cerca a Saúl y a sus hijos; y mataron a Jonatán, a Abinadab y a Malquisúa, hijos de Saúl.

La batalla arreció contra Saúl, y los que tiran con el arco lo encontraron; y fue herido gravemente por los arqueros.

Entonces Saúl dijo a su escudero: “Saca tu espada y atraviésame con ella, no sea que vengan esos incircuncisos y hagan mofa de mí.” Pero su escudero no quiso, porque tenía mucho miedo. Entonces Saúl tomó la espada y se dejó caer sobre ella.

Al ver su escudero que Saúl estaba muerto, él también se dejó caer sobre su espada y murió.

Así murió Saúl, y sus tres hijos y todos los de su casa murieron junto con él.

Y al ver todos los hombres de Israel que estaban en el valle que los de Israel habían huido, y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron sus ciudades y huyeron. Entonces los filisteos fueron y habitaron en ellas.

Aconteció que al día siguiente, cuando los filisteos fueron para despojar a los muertos, hallaron a Saúl y a sus hijos caídos en el monte Gilboa.
Le despojaron, tomaron su cabeza y sus armas, y enviaron mensajeros por toda la tierra de los filisteos para dar la buena noticia a sus ídolos y al pueblo.

Después pusieron sus armas en el templo de sus dioses, y clavaron su cabeza en el templo de Dagón.

Cuando todos los de Jabes, en Galaad, oyeron todo lo que los filisteos habían hecho con Saúl,

todos los hombres valientes se levantaron y tomaron el cadáver de Saúl y los cadáveres de sus hijos, y los llevaron a Jabes. Enterraron sus restos debajo de la encina en Jabes y ayunaron siete días.

Así murió Saúl por la infidelidad que cometió contra Jehova, respecto a la palabra de Jehova, la cual no guardó, y porque consultó a quien evoca a los muertos pidiendo consejo,

en lugar de pedir consejo a Jehova. Por esta causa él le hizo morir y transfirió el reino a David hijo de Isaí.

En este monte también sucedió el encuentro de los 10 leprosos y el Señor Jesús. Lucas 17:11-14

Aplicación Teoterapica


Luego de Dios haber mudado el corazón de Saul, de haberle dado la oportunidad de Reinar sobre Israel, comete errores, no se llena del Espíritu Santo, sino que decide vivir bajo sus propios parámetros y lógicas. un ungido que es desechado por no obedecer la voluntad de Dios.